Sevilla – Mérida 5 días en Sandalias (220 Km)
El 5 de Junio partimos yo, junto a mi padre, para realizar 5 etapas de la Vía de la Plata, siguiendo el Camino de Santiago. Partimos desde la Catedral de Sevilla, y realizamos un total de 220 km en cinco días hasta llegar a Mérida. Yo realicé todas las etapas a pie (sandalias), mientras mi padre, 74 años de edad y diagnosticado de Parkinson, lo hizo en bicicleta. La idea era llegar hasta Cáceres, pero por causas de fuerza mayor, tuvimos que terminar nuestra aventura en Mérida. Una experiencia única, que me ha permitido disfrutar de mi padre haciendo lo que nos gusta. Os dejo breves crónicas de etapa por etapa de como nos fue esta experiencia de un peregrino en sandalias y su padre.
Etapa1. Camino de Santiago (Sevilla-Castilblanco)
Primera etapa de la Ruta de la Plata que he hecho junto a mi padre (el en bicicleta) desde La Catedral de Sevilla a Castilblanco de los Arroyos. Desde que divisas la primera flecha, ya no tiene pérdida. Muy bien señalizado que hace seguir todo el recorrido sin miedo a perderte. El recorrido seco, con mucha piedra y alguna trialera, que si le añadimos que salimos tarde y de una calor insoportable, se me hizo interminable. Una paliza de 40 km que me dejó frito. Mi padre acabó con ganas de más. Quizás la etapa en la que peor lo pasé, ya que la calor hizo mucha pupa y llegué muy cansado. Hicimos una parada en Guillena para tomarnos un refresco y seguir rumbo a Castilblanco. Lo mejor, la visita de la familia por la tarde que nos hizo cargar pilas para seguir al día siguiente. Para dormir en Castilblanco, recomiendo… Casa Salvadora. 14€ la noche, y todo muy limpio.
Etapa 2. Castilblanco de los Arroyos – El Real de la Jara
Segunda etapa en la que nos las prometíamos felices y nos llevamos una ingrata sorpresa. Tres horas para hacer los 30 km que discurren desde Castilblanco de los Arroyos a Almadén y casi cuatro horas para hacer los 14 km de Almadén a Real de la Jara. Una primera parte con 17 km de asfalto que me hizo ir a un ritmo cómodo. Y luego unos 12 km por el Berrocal, con la Subida al Calvario, que se me hizo bastante fácil. La segunda parte es lo que no me esperaba, 14 km en los que se me ocurrió meter a mi padre por los caminos conmigo y donde era prácticamente imposible hacerlo en bicicleta. Si añadimos dos pinchazos y la llanta reventada, sumado a la edad del viejo, se convirtió en una auténtica odisea. Especialmente para mi padre. Gracias Mike por la ayuda. Sin tí aún estaríamos en la dehesa.Recomendación… Si vienes en bicicleta y no estas muy puesto, vete por la carretera, porque el sendero es casi imposible para hacerlo en bicicleta. Hemos almorzado en el bar la Cochera y hemos pernoctado en el Hostal Mari Carmen (20€ persona).
Etapa 3. El Real de la Jara – Fuente de Cantos
La etapa más llevadera hasta ahora. El Camino desde Real de Jara muy bueno, entre dehesas, eucaliptales y pista donde me han dejado correr a buen ritmo. La subida hasta Monesterio lo más duro, pero nada que ver con las dos etapas anteriores. Hoy hemos disfrutado del camino tanto yo corriendo, como mi padre en bicicleta. Hemos desayunado en la área de servicio que hay antes de empezar la subida a Monasterio; 7€ una tostada entera con jamón y dos café. No lo recomiendo.Y hemos tapeado en Fuente de Cantos. A tapita por cerveza, con lo que comimos sin necesidad de pedir ningún plato, entre otras cosas porque donde nos quedamos no tenían cocina, pero las tapas buenísimas. Nos hemos quedado en el Hostal Rural Zaguán. 50€ la noche el apartamento con dos habitaciones, cocina, salón y cuarto de baño. Con una piscina fantástica. Totalmente recomendable. Si vas en bicicleta y necesitas una tienda especializada, en Monesterio hay una donde puedes encontrar de todo.
Etapa 4. Fuente de Cantos – Villafranca de los Barros
La más larga de todas aunque bastante llana. Mucha piedra que me ha hecho bajar el ritmo ya que mis pies han sufrido muchísimo. Perdí a mi padre en Zafra y no había manera de dar con él, por lo que nos penalizó en el tiempo de realización de la etapa. La calor ha hecho mella y se nos ha hecho interminable la etapa. Todo el recorrido asequible con bicicleta. Nos desviamos a 8 km de Villafranca de los Barros para quedarnos en un albergue pero solo está abierto los fines de semana. Así que no nos quedó otra que continuar hasta Villafranca. Las piernas están cansadas pero con ganas de llegar hasta Mérida.
Hemos desayunado en el K-rnero’s en Fuente de Cantos, con un desayuno que quita el «sentío» y nos quedamos a dormir en el Hotel Acosta a pie de la carretera (40€ habitación doble). Si la piscina está «operativa», buen sitio para dormir, pero a un par de km del pueblo.
Etapa 5. Villafranca de los Barros – Mérida
Por causa mayor, este año nos quedamos en Mérida. La etapa de hoy, ha sido la más rápida de todas y muy llana. También me ha parecido la menos bonita de todas. Un total de 217 km en cinco días, disfrutando de la compañía de mi padre. Deseando seguir el camino en cuanto se pueda. 💪💪👣👣
En Mérida, hemos dormido en el Deluxe Hostels & Suites. 39€ habitación doble con piscina. Totalmente recomendable. Y almorzamos y cenamos en el Restaurante de Arco, junto al Arco de Trajano. Lugar increíble, por su situación y por sus tapas buenísimas. La parte de abajo es para tapeo y la de arriba restaurante. Nosotros tapeamos y comimos de diez. Nos atendió Gabriel que se portó increíble con nosotros. No os lo perdáis!
OJO!! He hecho las etapas corriendo todo lo posible. Si vas a hacerlo andando, no tomes mis tiempos como orientativos
Conclusión…
Una experiencia inolvidable junto a mi padre que no olvidaré en la vida. Cinco días, con una media de mas de 40 km diarios en las piernas, que acompañado de mis inseparables Sandalias, he podido realizar con muy buenas sensaciones. Me quedo con la «cosita» de no haber podido hacer las dos etapas restantes para completar las siete que teníamos en mente, pero con la satisfacción de poder hacerlo con un señor de 74 años con una voluntad de acero. Me parece increíble lo que ha sido capaz de hacer. Intentaremos volver para seguir nuestro camino desde donde lo dejamos.
Una vez más, me reafirmo en la idea de que, con una buena transición al minimalismo, a mayor cantidad de km, más eficiente es mi carrera.