Características del calzado minimalista
Aunque técnicamente no vamos descalzos si estamos usando zapatillas, el calzado minimalista está hecho para imitar los beneficios de estar descalzo mientras proporcionan un mínimo de protección a nuestros pies.
Perfil bajo y flexibles
Una de las características clave de las zapatillas minimalistas es la suela que utilizan, con poco perfil y flexibles, permitiendo una mayor propiocepción y mejorando nuestra retroalimentación sensorial, es decir, haciendo que nuestro cuerpo reciba información del lugar donde pisamos y actuando en consecuencia para mantener el equilibrio deseado. Esto implica que la persona pueda sentir mejor el suelo bajo sus pies, lo que puede conducir a una mejor postura. Además, las características del calzado llevado a lo esencial, anima a los músculos y tendones de los pies así como la zona de la pantorrilla trabajen más activamente, reduciendo significativamente el riesgo de lesión y fortaleciendo nuestros pies, mejorando nuestra salud.
Horma amplia
Otra característica que distingue a las zapatillas minimalistas es su horma amplia en la zona de los dedos de los pies, que les permite tener libertad de movimientos a la hora del contacto con el suelo, favoreciendo la estabilidad y el equilibrio. Los zapatos tradicionales a menudo comprimen los dedos de los pies, lo que lleva a problemas como juanetes, dedos en martillo y neuromas de Morton. El calzado minimalista, por otro lado, da a los dedos de los pies espacio para moverse libremente, fomentando que su posición dentro del zapato sea más natural y cómoda.
drop 0
Y como última característica del calzado minimalista, tenemos el drop, que es la diferencia en milímetros desde el talón hasta la punta de nuestro pie respecto al suelo. El drop que mejor se adapta a una pisada natural es el drop 0, de ahí que las zapatillas minimalistas se caractericen por la ausencia de drop. El llevar un drop demasiado elevado que no se adapte a esa pisada natural nos forzará a cambiar esa pisada, pudiendo causar molestias que podrían acabar en lesiones. Y esto último, no es que lo diga yo, son las propias marcas de zapatillas las que hablan de ello, como en este caso Salomon: «El drop lleva siendo el centro de atención desde hace muchos años, ya que una mala elección (o, dicho de otra forma, un elección que no se adapte a tu pisada natural) puede aumentar el riesgo de sufrir lesiones. Un drop que no se adapte a tu pisada natural te forzará a realizar una pisada diferente, aumentando de forma excepcional el estrés en músculos y tendones. En principio, esto podría causar dolores y malestar inusuales que podrían acabar convirtiéndose en tendinitis o periostitis«.
Más allá de los beneficios físicos, las zapatillas minimalistas también han llamado la atención por sus atributos ecológicos y sostenibles. Muchos fabricantes dan prioridad al uso de materiales ecológicos y métodos de producción, reduciendo la huella de carbono asociada con la fabricación de calzado. Además, el diseño minimalista a menudo significa que se utilizan menos materiales en la construcción en el calzado minimalista en comparación con el calzado tradicional, minimizando aún más su impacto ambiental.